Estilo, estética, vida y consumo
Este libro, en palabras de su autor Peio Aguirre, es un estudio de detección de lo que las estéticas nos dicen respecto del mundo actual, la globalización en el capitalismo tardío
En su formulación inicial, la Teoría de los Juegos, surge como un intento de definir cómo debemos comportarnos los seres humanos en los conflictos humanos interpersonales adoptando un punto de vista racional. La Teoría de los Juegos es, ante todo, un sofisticado aparato matemático de análisis de cierta clase de situaciones que, metafóricamente reciben la denominación de juegos.
Los juegos se caracterizan por la interacción de dos o más jugadores, que persiguen diferentes fines, tales como ganar el juego, derrotar selectivamente a uno o varios jugadores, o simplemente llegar a cierto grado de equilibrío suficientemente satisfactoria para todos y se conducen estratégicamente, es decir, como sujetos racionales en medios en los que otros sujetos, también racionales persiguen igual que ellos fines que pueden entrar en conflicto. Los juegos pues, son escenarios en los que surgen paradógicamente tanto estrategias de conflicto como de cooperación o alianza.
Como modelizaciones, los juegos permiten seleccionar y estudiar grupos de variables que se consideran centrales en un determinado contexto, mostrando su influencia en la conducta de los actores y, como en el ajedrez, previendo tipos de respuestas ante determinados movimientos.
En la imagen: Fotografía de Grafèin de un aspecto parcial de la exposción COSMOSIS realizada en Imatra
Hacia 1938, Paul Valèry escribió: «La Historia de la Literatura no debería ser la historia de los autores y de los accidentes de su carrera, sino la historia del espíritu como productor o consumidor de literatura. Esa historia podría llevarse a término sin mencionar un solo escritor». Veinte años antes, Shelley dictaminó que todos los poemas del pasado, del presente y del porvenir, son episodios o fragmentos de un solo poema infinito, erigido por todos los poetas del orbe (A Defense of Poetry 1821)
Esas consideraciones (implícitas desde luego en el panteísmo) permitirían un inacabable debate analizado por el gran Jorge Luis Borges en un poema de Coleridge que dice literalmente: «Si un hombre atravesara el Paraiso en un sueño, y le dieran una flor como prueba de que había estado allí, y si al despertar encuentra esa flor en su mano…. entonces ¿Qué?»
Detrás de la invención de Coleridge está la general y antigua invención de las generaciones de amantes que pidieron como prenda una flor.
En el orden de la literatura, como en los otros de la vida, no hay acto que no sea coronación «corona virus» de una infinita serie de causas y manantial de una infinita serie de efectos.
Más increíble que una flor celestial o que la flor de un sueño es la flor futura, la contradictoria flor cuyos átomos ahora ocupan otros lugares y no se combinaron aún, una vacuna para el «corona virus»
Quizás lo más característico de las nuevas sociedades es en efecto su transformación estructural en cuanto a las relaciones de producción, su terciarización. En las sociedades del postfordismo, la parte más importante del trabajo que se realiza ya no tiene por objeto la producción de bienes materiales, sino que se orienta a la producción intelectual y afectiva, a alimentar nuestras necesidades de sentido y deseo, de significado y placer. Al mismo tiempo, también el consumo de bienes inmateriales, cuya circulación está regulada por las industrias culturales definitivamente fundidas con las del ocio y la comunicación, está tendiendo a convertirse en el modo principal del consumo.
La consecuencia es que la centralidad antes ocupada en cuanto a la generación de riqueza por la posesión del capital bascula ahora hacia la posesión de la propiedad intelectual, objeto principal de la nueva reordenación del sistema capitalista. Las prácticas artísticas deben encontrar su lugar en relación a todos estos procesos de transformación
Como en el hermoso cuento de Paúl Valèry donde se narra la noche de los animales, sucede a veces que juntas todas las especies, tanto las predadoras como las que van a ser devoradas descienden hacia el río para saciarse de agua y, después de haberse hartado, con el respeto que ese acto vital les inspira, el león, por ejemplo, al lado de la gacela hace una tregua.
La vida, que es la suma de los animales vivos, en un instante dado se dispone en torno al Rey Noche y se produce una pausa.
Son los textos ya clásicos de F. Jameson sobre la lógica cultural del capitalismo avanzado los que definen el marco para una meditación seria sobre el espacio y nuestra contemporaneidad. El interés por la teoría geopolítica, la estética del lugar y una revitalizada voluntad, incluso en la teoría social y el arte, por abrir el problema de la espacialidad a una reconsideración o replanteamiento general son analizados por
Alberto Toscano&Jeff Kinkle (Zero books, 2015) en: Cartographies of the absolute
La red global de comunicaciones provoca el colapso de las viejas barreras espaciales. Todos los lugares, todos los espacios son accesibles ahora, instantáneamente. Esto no solo no representa la aniquilación del espacio por el tiempo, sino que convierte a esta nueva espacialidad en una de las claves fundamentales para explicar el desarrollo económico.
El mercado es la forma en que el capital, a un ritmo cada vez más vertiginoso, convierte envoltorios indiferentes desde el punto de vista material y funcional en más capital.
Frente al desorbitado potencial que poseen las industrias contemporáneas del espectáculo y redes sociales, resistir a su efecto de empobrecimiento cualitativo y expropiación de la experiencia que las caracteriza, puede ser el leit motiv de una nueva política.
Acaso en esa tarea de esa nueva política definida en la era del trabajo inmaterial, las prácticas artísticas lograrán encontrar, en un proceso de transformación de las sociedades actuales sus mejores argumentos de futuro.
Los mecanismos sociales de reconocimiento y diferenciación, de socialización y subjetivación, de pertenencia a un grupo social y distinción dentro de él, se hacen reposar por encima de todo en el valor estetizado, y es la carga de éste que el nuevo capitalismo añade a objetos y relaciones, materiales o inmateriales, la que determina su nuevo valor social.
Dis-play, hacer visible el propio espacio de la representación, comprender el marco que aborda la investigación y reflexión las problemáticas actuales de la creación artística y el diseño es una prioridad para Imatra
Por más de una razón deberíamos asemejar el trabajo del arte al del sueño: es una producción que induce formaciones de superficie que expresan, que traducen aproximadamente un estado descompasado de energías. Lo esencial en ellas es no es la forma o apariencia que adquieren en un instante dado, sino el campo de intensidades -o sea- el diferencial de potenciales en que se efectúan.
El trabajo del arte ya no más tiene que ver con la representación ¿Alguien pensaría que el del sueño -ese que induce un «contenido aparente» en quien revive el «latente» o lo cuenta por la mañana- tiene que ver con la re-presentación. ¿De qué?
Negativo: el trabajo del sueño expresa una economía de las fuerzas, una tensión de las energías una disposición de la distribución diferencial:
Este libro, en palabras de su autor Peio Aguirre, es un estudio de detección de lo que las estéticas nos dicen respecto del mundo actual, la globalización en el capitalismo tardío
En su formulación inicial, la Teoría de los Juegos, surge como un intento de definir cómo debemos comportarnos los seres humanos en los conflictos humanos interpersonales adoptando un punto de vista racional. La Teoría de los Juegos es, ante todo, un sofisticado aparato matemático de análisis de cierta clase de
Hacia 1938, Paul Valèry escribió: «La Historia de la Literatura no debería ser la historia de los autores y de los accidentes de su carrera, sino la historia del espíritu como productor o consumidor de literatura. Esa historia podría llevarse a término sin mencionar un solo escritor». Veinte años antes,
Quizás lo más característico de las nuevas sociedades es en efecto su transformación estructural en cuanto a las relaciones de producción, su terciarización. En las sociedades del postfordismo, la parte más importante del trabajo que se realiza ya no tiene por objeto la producción de bienes materiales, sino que se
Como en el hermoso cuento de Paúl Valèry donde se narra la noche de los animales, sucede a veces que juntas todas las especies, tanto las predadoras como las que van a ser devoradas descienden hacia el río para saciarse de agua y, después de haberse hartado, con el respeto
Son los textos ya clásicos de F. Jameson sobre la lógica cultural del capitalismo avanzado los que definen el marco para una meditación seria sobre el espacio y nuestra contemporaneidad. El interés por la teoría geopolítica, la estética del lugar y una revitalizada voluntad, incluso en la teoría social y
Frente al desorbitado potencial que poseen las industrias contemporáneas del espectáculo y redes sociales, resistir a su efecto de empobrecimiento cualitativo y expropiación de la experiencia que las caracteriza, puede ser el leit motiv de una nueva política. Acaso en esa tarea de esa nueva política definida en la era
Los mecanismos sociales de reconocimiento y diferenciación, de socialización y subjetivación, de pertenencia a un grupo social y distinción dentro de él, se hacen reposar por encima de todo en el valor estetizado, y es la carga de éste que el nuevo capitalismo añade a objetos y relaciones, materiales o
Por más de una razón deberíamos asemejar el trabajo del arte al del sueño: es una producción que induce formaciones de superficie que expresan, que traducen aproximadamente un estado descompasado de energías. Lo esencial en ellas es no es la forma o apariencia que adquieren en un instante dado, sino
© Imatra Bilbao