En su reciente visita al Estudio Imatra, el arquitecto Diego Sologuren tomó está fotografía en la que podemos ver en primer plano a la izquierda la lámpara diseñada por Tejo Remy para Droog Design en 1991
Diego Sologuren ha desarrollado su carrera profesional a nivel internacional colaborando con estudios de arquitectura de gran reconocimiento como es el caso entre otros, con el Estudio de Arquitectura de Francis Kéré de Burkina Faso (Premio Pritzker 2022) radicado en Berlín; y en nuestro cordial encuentro, la conversación giró en torno a la necesidad de articular propuestas de modo conjunto y colaborativo, prestando atención a la creación de contexto, fusionando intereses particulares entre las y los creadores de distintas disciplinas (arte, diseño de producto, gráfico, display, urbanismo) como una forma más de economía y ecología propiamente ‘autogestionada’ por los propios creadores y creadoras, para construir ciudad y entorno desde el compromiso con el usuario, el medio ambiente y el patrimonio.
Todos los materiales, no importa que sean naturales o artificiales, tienen unas cualidades específicas que deben ser conocidas si queremos trabajar con ellos. Los nuevos materiales y los nuevos modos productivos no son garantía de superioridad por sí mismos. Lo fundamental es la relación que puede establecerse entre ellos: Cada material, cada modo productivo tiene valor solo por lo que puede obtenerse de él.
Exposición en París del 16 de enero al 7 de marzo 2020. Más información en Imatra. Costa 12-14 48010 BILBAO.
En la dinámica del trabajo del día a día, son los encargos de pequeños proyectos los que más nos acercan a los clientes y a sus propósitos, y lejos de la mera imposición de ideas formalistas o aparatosas de los proyectos «importantes» -éstos- los pequeños. favorecen un proceso en el que la toma de decisiones viene sugerida fundamentalmente por las cualidades del lugar y las condiciones de vida de sus moradores. Cuando se trabaja con espacios ya existentes se trata de reconfigurar esos espacios e introducir nuevos elementos y materiales pero siempre y sobre todo se trata de confiar en que el contenedor lo programado y el usuario final puedan dar forma a la arquitectura.
El interés de la figura social, representada por el artista, comprende en su interior no sólo el dinero, sino también, y sobre todo, la necesidad de sobrevivir frente a otras clases que surgen históricamente al mismo tiempo que emerge, social e institucionalmente, la industria, el poder político, el poder tecnológico etc.
La creación deja, pues, de ser formal y organiza los datos según reglas nuevas más racionales. Las formas del lenguaje estético salen de la lógica sectorial y explotan sobre toda la sociedad. El estilo es, precisamente, el máximo control que el artista ejerce sobre su propio trabajo en el intento de hacer depender del mismo incluso a la organización del mercado.
La negación de la colectividad mediante la absoluta subjetividad de la anti-mercancía creaba uno de los módulos clásicos de la economía de mercado en las sociedades capitalistas avanzadas, acoplando como incremento productivo los valores todavía «vivos» de la negación o de la utopía.
Muchas de las muestras y actividades que suceden en Imatra giran una y otra vez alrededor de observaciones, objetos y proyectos que tienen a la casa como centro. Se propone, así, un modo de estudio indirecto, del conjunto de aspectos que aún guardando con la casa una relación muy estrecha vinculan a los habitantes de la misma con factores de muy diversa naturaleza. Es posible que los cambios profundos que demanda la sociedad ahora mismo, dependan de cambios en el modo de habitar.
Le Corbusier solía referirse a la ciencia de la casa como Domismo, equiparándola a la ciencia que rige las leyes de la ciudad. Cuando hablamos de diseño, hablamos también de otorgar a la casa el derecho de ser planificada en el tiempo para poder llegar a ser construída como ciudad, es así como el nombre de Imatra rinde homenaje a una ciudad útópica que podría llegar a ser real algún día
Este interior pertenece a una serie de ejemplos seleccionados por Imatra para la muestra que actualmente presenta en Bilbao. calle Costa 12-14.2º
Con un vocabulario regido por la geometría y el rigor se muestran una selección de interiores, puestos en valor como modelos de un producto de diseño en tanto que producción cultural.
Una de las tesis que Imatra defiende en el actual proyecto que presenta en la calle Costa de Bilbao es que el diseño no puede ser únicamente entendido como fenómeno específico, sino que para ser activado requiere ser puesto en contacto con un modo de vida de un modo tal, que sea capaz de dibujar un recorrido transversal por los fenómenos más cotidianos de nuestra vida de lo doméstico a lo político.
In 1982 Fritz Hansen took over the production and sales of «The Kjaerholm collection» developed from 1951 to 1967, design, which are logical to the minute detail, and aura of exclusivity.
Imatra reivindica a Poul Kjaerholm, como uno de los diseñadores más interesantes del siglo XX y hace una interpretación de los muebles y objetos producidos por Fritz Hansen que distribuye, expone y vende.
Los objetos realizados por algunos destacados diseñadores captan la mirada y la retienen en la mera contemplación de lo observado por el disfrute visual que proporcionan a cuantos las observan, pero las creaciones de Ingo Maurer incitan a superar ese nivel epidérmico y retiniano, para superado ese primer nivel sensorial, instalarnos en un plano más personal y reflexivo, trenzado por sutiles reflexiones.
La pieza «Broken Egg» fue presentada en la semana del diseño en Milán de 2013 y ahora sirve de reflexión a Imatra para la propuesta que inaugura la nueva etapa que inicia en la calle Costa 12- 14 de BILBAO.
En esta singular instalación, el diseño muestra su capacidad de dar forma poética a un trabajo que aúna arquitectura, diseño y tecnología.
Imatra reúne una selección de piezas que muestran sutiles interrogantes sobre la conceptualización de los objetos y sus vínculos con lo cercano y lo doméstico
La recuperación para otros usos, de los abandonados pabellones industriales ante el declive industrial del pasado siglo, supone un reto para la arquitectura más actual. En primer lugar la imperturbable apariencia de caja de hormigón de estos espacios, despierta una sensibilidad que nos acerca al objetivo primario de la arquitectura, que no es otro que establecer un modelo espacial del mundo., y la imperiosa necesidad de construirnos en él una morada.
Para ello, la arquitectura precisa de la geometría. La geometría, pues, es la ciencia dedicada a producir un orden, a partir de las relaciones de forma con forma y de forma con espacio. No obstante, la geometría adopta una forma estrictamente ideal: la forma como idea, como representación visible de un concepto, de un espacio material y abstracto, de un escenario
Imatra en el recuperado pabellón de la Calle Costa 12-14 de BILBAO viene trabajando desde el año 2.000 sobre estos postulados que en este momento le interesa intensificar, indica Pilar Blanco, en la necesidad de sustituir una representación de la experiencia, por una representación como experiencia. Transformar el orden espacial en un fenómeno consciente, la arquitectura ha de suscitar la mediación de la gente .(1) Es la gente, el visitante el que activa el mecanismo de la arquitectura para suscitar emociones.
Mundos de vida, aquellos mundos de vida concretos que tienen su expresión en el propio espacio público de la ciudad, entendida ésta como plasmación efectiva y real de la interacción pública, como polis, como lugar de encuentro efectivo de los individuos en tanto que «muchos», que pluralidad.
(1) Gente, en el sentido que aquí nos interesa utilizar, se refiere a ese sujeto colectivo al que pertenece el futuro, para lo cual debe empoderarse, potenciando un espíritu de comunidad ilusionada.
The milk bottles just above the ground on long cables in a cluster of twelve-three times four rows of bottles, exactly as it is a Dutch milk crate En su reciente visita al Estudio Imatra, el arquitecto Diego Sologuren tomó está fotografía en la que podemos ver en primer plano
Todos los materiales, no importa que sean naturales o artificiales, tienen unas cualidades específicas que deben ser conocidas si queremos trabajar con ellos. Los nuevos materiales y los nuevos modos productivos no son garantía de superioridad por sí mismos. Lo fundamental es la relación que puede establecerse entre ellos: Cada
En la dinámica del trabajo del día a día, son los encargos de pequeños proyectos los que más nos acercan a los clientes y a sus propósitos, y lejos de la mera imposición de ideas formalistas o aparatosas de los proyectos «importantes» -éstos- los pequeños. favorecen un proceso en el
El interés de la figura social, representada por el artista, comprende en su interior no sólo el dinero, sino también, y sobre todo, la necesidad de sobrevivir frente a otras clases que surgen históricamente al mismo tiempo que emerge, social e institucionalmente, la industria, el poder político, el poder tecnológico
Muchas de las muestras y actividades que suceden en Imatra giran una y otra vez alrededor de observaciones, objetos y proyectos que tienen a la casa como centro. Se propone, así, un modo de estudio indirecto, del conjunto de aspectos que aún guardando con la casa una relación muy estrecha
Este interior pertenece a una serie de ejemplos seleccionados por Imatra para la muestra que actualmente presenta en Bilbao. calle Costa 12-14.2º Con un vocabulario regido por la geometría y el rigor se muestran una selección de interiores, puestos en valor como modelos de un producto de diseño en tanto
Una de las tesis que Imatra defiende en el actual proyecto que presenta en la calle Costa de Bilbao es que el diseño no puede ser únicamente entendido como fenómeno específico, sino que para ser activado requiere ser puesto en contacto con un modo de vida de un modo tal,
Los objetos realizados por algunos destacados diseñadores captan la mirada y la retienen en la mera contemplación de lo observado por el disfrute visual que proporcionan a cuantos las observan, pero las creaciones de Ingo Maurer incitan a superar ese nivel epidérmico y retiniano, para superado ese primer nivel sensorial,
La recuperación para otros usos, de los abandonados pabellones industriales ante el declive industrial del pasado siglo, supone un reto para la arquitectura más actual. En primer lugar la imperturbable apariencia de caja de hormigón de estos espacios, despierta una sensibilidad que nos acerca al objetivo primario de la arquitectura,
© Imatra Bilbao